Obra de improvisación estructurada, en donde un sujeto construye distintos paisajes contemplativos, a través de diferentes situaciones, que se presentan en su viaje interno.
Esta obra es una travesía sin rumbo, sin velas, ni ancla que nos traslada a paisajes nostálgicos y frágiles que se desdoblan al interactuar con un barco de papel y otros elementos en escena. Un viaje en dirección al sin sentido, en busca de reconstruir su propia historia.